febrero 17, 2010

Me descubrí bebiendo de mi misma y no dejándole a los demás.
Me descubrí desposeída, desajustada y decepcionada.
Me descubrí a punto del vomito, una mañana fría.
Me descubrí como una sanguijuela agarrada a mis propias costillas
o como la sangre que chorrea en la mesada.
Menos mal que fui yo quien me descubrió.

1 comentario:

  1. que buenas imágenes
    te veo toda enroscada secándote
    dejanos un poco de vos

    digo anónimo
    pero I am the Fruit

    ResponderBorrar