Yo me pregunto
si el cielo vive
si por sus venas
corre la sabia
de los árboles
que como niños
tocan la luna
en noches estrelladas.
g
febrero 23, 2010
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Los detuvieron por atentado al pudor. Y nadie les creyó cuando el hombre y la mujer trataron de explicarse. En realidad, su amor no era sencillo. Él padecía claustrofobia, y ella, agorafobia. Era sólo por eso que fornicaban en los umbrales.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario